Manuel Cúneo Camargo: “Cuando estás en una concentración nacional, siempre está la ilusión de quedar en una lista definitiva para el Mundial”.

El integrante del seleccionado juvenil argentino y jugador del San Juan Rugby habló con Ojo Deportivo sobre la convocatoria, las exigencias de los entrenamientos, que se siente vestir la camiseta de Los Pumitas y sobre la ilusión de quedar en una lista definitiva.

Su historia en las categorías formativas

“En mi primera concentración con el seleccionado fue todo muy repentino, me llamaron después del Argentino Juvenil M17. Fue una gran noticia para mí y toda mi familia”, recuerda Cúneo Camargo. Ahora, con mayor experiencia y confianza, afronta este nuevo desafío con la misma ilusión y compromiso.

Un desafío de alta exigencia

El sanjuanino reconoce que cada concentración nacional es una prueba de alto nivel. “Todas las concentraciones tienen una exigencia máxima. A medida que pasa el tiempo, el golpe cambia y todos vamos creciendo y subiendo el nivel", explica. En esta ocasión, bajo la dirección de Nicolás Fernández Miranda.

Sobre la relación con el cuerpo técnico, Camargo destaca la cercanía y el seguimiento personalizado. “Los entrenadores siempre están dispuestos a hablar con los jugadores. Te exigen que des lo mejor de vos mismo y, si ven un detalle a mejorar, te lo dicen. Todos tenemos el mismo objetivo: mejorar”, afirma.

Sus sensaciones tras las convocatoria

Cada paso en su carrera es una conquista, y esta convocatoria no es la excepción. “Es un gran paso en mi pequeña carrera. Uno entrena mucho y deja muchas cosas de lado para quedar en listas como esta. Cada entrenamiento, concentración o partido es un paso más”, reflexiona.

Los objetivos para esta concentración

El horizonte es claro: pelear por un lugar en una competencia internacional con Los Pumitas. “Obviamente, cuando estás en una concentración nacional, siempre está la ilusión de quedar en una lista definitiva para el Mundial”, reconoce el forward sanjuanino.

El sueño de vestir la celeste y blanca

Vestir la camiseta argentina es, sin dudas, una de las mayores emociones de su vida. “Es un orgullo muy grande, no hay palabras para describir el sentimiento de ponerse por primera vez la camiseta. Es algo inexplicable”, expresa con pasión.

Mensaje para las nuevas generaciones

Manuel Cúneo Camargo sabe que su camino recién comienza, pero también reconoce el valor del esfuerzo y la dedicación para llegar hasta aquí. Por eso, les deja un mensaje a los jóvenes rugbiers que sueñan con representar al país: “Todo es posible si se lo proponen. Hay que entrenarse, hacer amigos -que es de lo más lindo que te deja el rugby- y, sobre todo, divertirse”.

Con la mirada puesta en seguir creciendo y en alcanzar nuevas metas, el sanjuanino se prepara para dar lo mejor en esta concentración, con la esperanza de que sea el trampolín para cumplir su sueño de representar a la Argentina en el máximo nivel del rugby juvenil.